10 Cosas Que La Biblia Nos Dice Acerca Del Amor

En 1 Juan 4:19 encontramos que: “Nosotros amamos, porque Él nos amó primero.” Sin Dios, nosotros no seríamos capaces de amar. El amor es algo que emana de Dios.

Dios desarrolla nuestro carácter en nuestro caminar con Él, mientras más caminamos con Dios, será más notable para la gente reconocer a Dios en nosotros. Dios nos dice en 1 Juan 3:2 que un día nosotros seremos semejantes a nuestro Padre Celestial. ¡Qué gran día será aquel!

Cuando éramos jóvenes amábamos a los demás en base a lo que podían hacer por nosotros o en lo que podían ofrecernos. Queríamos a nuestros hermanos porque jugaban con nosotros, a nuestros amigos porque nos hacian feliz, y aun el dia de hoy mucha gente ama cosas como su celular o la pizza por la satisfacción que les da.

Pero cuando maduramos nos damos cuenta que el amor es en verdad algo mucho más profundo. Cuando amamos a alguien queremos ofrecer y dar no solamente tomar. Romanos 5:8 dice: “Pero Dios demuestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.” Esta es la máxima expresión de dar por amor, dar la vida misma.

El amor requiere que pensemos en la otra persona; que pongamos sus necesidades antes que las nuestras. Por el contrario el mensaje que el mundo da es que nosotros merecemos todo primero. Pero ese mensaje es completamente opuesto a lo que la Biblia nos enseña. En la Biblia encontramos que debemos de ser como Jesús quien amo sin condiciones, quien vino a servir a los demás y no a ser servido.

Hebreos 12:2 nos dice que Jesús soportó la cruz, a pesar del dolor y la vergüenza a la que fue sometido, ¿por qué? Porque El dió lo que más valoraba, el amor. En  Juan 15:13  vemo que: “Nadie tiene un amor mayor que éste: que uno dé su vida por sus amigos”

Si pensamos en otra persona es porque queremos saber lo que sienten, lo que piensan, las necesidades que tienen y todo eso lo aprendemos escuchando.

Cuando oramos, Dios está siempre escuchando atentamente, y aún más, nos invita a poner todas nuestras necesidades en Él (1 Pedro 5:7). ¿Por qué lo hace? Porque a Dios le importan todas y cada una de nuestras necesidades. Cuando mi nieto, Charlie, de 3 años perdió su carrito de juguete favorito se puso muy triste; porque yo amo a Charlie su dolor me dolió a mí. Así que cuando oramos a Dios y pudimos encontrar su carrito los tres, Charli, Dios y yo estábamos felices.  
 

Dios nos ama tanto que pone un escudo de protección a nuestro alrededor, siempre está dispuesto a ayudar cuando le necesitamos y siempre se asegura que sus ángeles guarden de nosotros. Tal cual un padre amoroso Él ve por sus hijos con cariño, celo y amor. Nos da protección bajo su cuidado.   

Salmos 91:12 “En sus manos te llevarán, para que tu pie no tropiece en piedra.” Este versículo de los Salmos nos recuerda que Dios es nuestra protección y nuestro pronto auxilio.

Una de las mejores características del amor es que siempre va ligado de la gracia, eso quiere decir que cuando alguien te hace un mal, tú te comportas con gracia para perdonar. En la Biblia Jesús nos dice que debemos perdonar aun setenta veces siete una forma de decir que hay que perdonar siempre de la misma manera que Dios nos extiende su perdón sin condición a cada instante. Perdonar quiere decir que no guardamos ningún tipo de resentimiento en contra de una persona, que no llevamos cuenta y mucho menos que queramos ponernos a cuentas. Hebreos 8:12 “PUES TENDRE MISERICORDIA DE SUS INIQUIDADES, Y NUNCA MAS ME ACORDARE DE SUS PECADOS.”

Por lo tanto no guardamos rencores ni busquemos ponernos al tanto o dar ojo por ojo y diente por diente. Dios nos ha perdonado y se ha olvidado de nuestras transgresiones.

Cuando trabaja como empacadora de comida en un supermercado, la cajera que estaba a lado mío recibió un ramo de flores. “¿No son hermosas?” Me preguntó. “Claro que sí”, respondí yo. Pero en secreto me dije a mi misma que yo prefería los lirios del valle. Diez minutos más tarde una mujer se me acercó a mí y en sus manos llevaba precisamente mi flor preferida. “Toma son para tí”, me dijo con una sonrisa. Emocionada después de darle las gracias puse las flores en mi delantal por el resto del día. Nunca se me ha olvidado el día en que Dios me dió flores.

De varia maneras y en varias formas Dios nos muestra su grande amor de maneras especiales. A lo mejor es el trabajo que queríamos, o la sanidad de un ser querido y a veces puede que sea un ramo de lirios del valle.

Tantas cosas en nuestras vidas son temporales, nuestros trabajos, la tecnología, aun a veces incluso hasta nuestras relaciones. Hoy dia hay tendencia en las redes sociales de simplemente deshacerse de una amistad con un clic. Pero nuestra relación con Dios es muy diferente. Dios comenzó nuestra amistad el día en que aceptamos a su hijo Jesús y es una relación a la cual Él se ha comprometido por toda la eternidad.

Esa es precisamente la parte difícil a entender, especialmente si alguna vez tu has tenido una relación que ha terminado a pesar de lo sólida que parecía. Alguien te prometio amarte y tu corazón fue herido cuando la promesa no fue cumplida. Pero Dios siempre cuida y cumple sus promesas, Él es Dios de promesas, y Él dijo que nunca nos dejará ni nunca nos desamparará. Su fidelidad es infinita al igual que su presencia, paz, amor y perdón.

Muchas veces la disciplina puede no parecer mucho al amor, pero Dios nos dice en Hebreos 12:6 “PORQUE EL SEÑOR AL QUE AMA, DISCIPLINA, Y AZOTA A TODO EL QUE RECIBE POR HIJO.” Cuando maduramos entendemos que el amor requiere de disciplina así como requiere de compromiso. A veces requiere corrección, y es así como aprendemos que las lecciones más valiosas a veces están escondidas y necesitamos ser disciplinados y comprometidos para encontrarlas.

Cuando un niño corre hacia la calle sin tener cuidado, el padre lo disciplina y así le enseña a ser más cauteloso, es por su protección. Cuando ponemos nuestra esperanza en Dios el hace nuestros caminos rectos.

Cuando accidentalmente cerré la puerta del carro sin ver que los dedos de mi hijo seguían aún en la ranura de la puerta, con lágrimas mi hijo me vio y dijo: ¿Por qué lo hiciste?”

A veces nos cuesta mucho trabajo creer que Dios permitiria que pasemos por un momento de dolor en nuestras vidas, pero entre mejor lo conocemos, mejor entendemos su carácter por lo que nos acercamos más a Él especialmente cuando las cosas se tornan difíciles.

Cuando amamos a alguien queremos estar siempre presentes para ayudarlos cuando pasan por alguna dolencia. 2 Corintios 1:4 “el cual nos consuela en toda tribulación nuestra, para que nosotros podamos consolar a los que están en cualquier aflicción con el consuelo con que nosotros mismos somos consolados por Dios.” El Espíritu Santo nos fue dado porque Dios quiso que estemos siempre consolados. Eso es amor.

Anne Peterson es una poeta y autora con 14 publicaciones que incluyen sus series poéticas “He Whispers: conversaciones poéticas con Dios.” Igualmente Anne ha publicado libros para niños llenas de verdades. Si gustas visitar la página del autor para leer sus publicaciones o bien encuentrala en su página de internet. Anne es una contribudora regular de Crosswalk.com