La Biblia de las Américas (Español) BLA
2 Corintios 1:12
Porque nuestra satisfacción es ésta: el testimonio de nuestra conciencia que en la santidad y en la sinceridad que viene de Dios, no en sabiduría carnal sino en la gracia de Dios, nos hemos conducido en el mundo y especialmente hacia vosotros.
English Standard Version ESV
12
For our boast is this, the testimony of our conscience, that we behaved in the world with simplicity and godly sincerity, not by earthly wisdom but by the grace of God, and supremely so toward you.
La Biblia del Jubileo 2000 JBS
12
Porque nuestro regocijo es éste: el testimonio de nuestra conciencia, que con simplicidad y sinceridad de Dios, no con sabiduría carnal, sino con la gracia de Dios, hemos conversado en el mundo, y mucho más con vosotros
King James Version KJV
12
For our rejoicing is this, the testimony of our conscience, that in simplicity and godly sincerity, not with fleshly wisdom, but by the grace of God, we have had our conversation in the world, and more abundantly to you-ward.
Nueva Traducción Viviente NTV
2 Corintios 1:12
Cambio de planes de Pablo
Podemos decir con confianza y con una conciencia limpia que, en todos nuestros asuntos, hemos vivido en santidad
y con una sinceridad dadas por Dios. Hemos dependido de la gracia de Dios y no de nuestra propia sabiduría humana. Esa es la forma en que nos hemos comportado ante el mundo y en especial con ustedes.
Nueva Versión Internacional NVI
12
Para nosotros, el motivo de satisfacción es el testimonio de nuestra conciencia: Nos hemos comportado en el mundo, y especialmente entre ustedes, con la santidad y sinceridad que vienen de Dios. Nuestra conducta no se ha ajustado a la sabiduría humana sino a la gracia de Dios.
La Biblia Reina-Valera (Español) RVR
12
Porque nuestra gloria es esta: el testimonio de nuestra conciencia, que con simplicidad y sinceridad de Dios, no con sabiduría carnal, mas con la gracia de Dios, hemos conversado en el mundo, y muy más con vosotros.
Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV
12
Porque nuestro regocijo es este: el testimonio de nuestra conciencia, que con simplicidad y sinceridad de Dios, no con sabiduría carnal, sino con la gracia de Dios, hemos conversado en el mundo, y mucho más con vosotros.