Isaiah 43

En la lectura de hoy:

El cuidado de Dios sobre Israel; el error de la idolatría; Jerusalén y el templo serían reconstruidos; el propósito de Dios sobre Ciro; el poder de Dios y la debilidad de los ídolos

Cuando Isaías era profeta el pueblo en Jerusalén se sentía seguro, pues Jerusalén era la ciudad de Dios donde estaba Su templo. Por esa razón, la profecía de Isaías sobre las «ruinas» de Jerusalén fue muy espantoso. Pero él también les dio esperanza, diciendo: «Así dice Jehová, tu Redentor . . . que dice a Jerusalén: Serás habitada; y a las ciudades de Judá: Reconstruidas serán, y sus ruinas reedificaré» (Isaías 44:26). Isaías profetizó sobre la destrucción y la restauración del templo mientras que todavía estaba allí, las paredes de la ciudad estaban en perfecta condición, y la nación se gozaba de su libertad, su prosperidad, y su seguridad.

Durante este tiempo, Babilonia, la capital de la dinastía de los caldeos, estaba rodeada por enormes paredes de 300 pies de altura y lo suficiente ancho para que los carros de guerra se pasearan de dos en dos. Los babilonios estaban también seguros que nadie podía invadir su gran ciudad. Sin embargo, Isaías correctamente predijo que un hombre llamado Ciro iba a conquistar a Babilonia. Esta profecía fue revelada 150 años antes que pasara. Dios «que dice de Ciro: Es Mi pastor, y cumplirá todo lo que Yo quiero, al decir a Jerusalén: Serás edificada; y al templo: Serás fundado. Así dice Jehová a Su ungido, a Ciro, al cual tomé Yo por su mano derecha, para sujetar naciones delante de él . . . y las puertas no se cerrarán . . . » (44:27-28; 45:1-3).

Sólo Dios podía haberle dado a Isaías esos notables detalles sobre la derrota de Babilonia: «Y Babilonia . . . será como Sodoma y Gomorra» (13:19). Al final de los 70 años del cautiverio de Judá, esta profecía se cumplió tal como el profeta lo predijo. Aun cuando los hombres piensen que ellos están en control de este mundo, Dios está obrando Su supremo plan para las épocas. Esta verdad debe de eliminar cualquier pregunta sobre el amoroso interés de Dios y Su amoroso cuidado sobre Sus seguidores. Dios tiene un perfecto plan para nuestras vidas, y es de mayor importancia que leamos Su Palabra cada día para poder cumplir Su voluntad. Solamente entonces es que podemos llegar a ser las personas que Dios quiere que seamos para cumplir el propósito por el cual Él nos creó.

Es un hecho verdadero que hasta: «Como los repartimientos de las aguas, así está el corazón del rey en la mano de Jehová; a todo lo que quiere lo inclina» (Proverbios 21:1).

Pensamiento para hoy:

Dios no es limitado; Él cumplirá Su Palabra.

Lectura opcional: Santiago 4

Versículo de la semana para aprender de memoria: Habacuc 3:18