El dinero parece ser un tema muy común  en la sociedad americana de hoy día. Nuestra economía está débil y por lo tanto financieramente también lo están muchas personas.   

Como cristianos sabemos que Dios, y no la economía, es la fuente de nuestra seguridad. No obstante muchos cristianos han visto que sus finanzas han sido también afectadas adversamente como consecuencia de la economía tan frágil. Asi que ¿cómo podemos confiar en Dios aun a pesar de recibir sueldos menores, despidos desenfrenados, cuentas por pagar cada vez más caras y el valor de nuestras propiedades a la baja? ¿Cómo podemos mantener nuestra fe en medio de problemas económicos? Estas son unas cuantas maneras en que Dios nos muestra en Su Palabra a perseverar aún a pesar de las tribulaciones.          

Tu Enfoque

Lo que más me ha ayudado en mis más recientes tiempos de tribulación económica es enfocarme en las cosas con importancia, que no son las circunstancias sino Dios y lo que Él hace en mi. 2 de Corintios 4:18 dice: “al no poner nuestra vista en las cosas que se ven, sino en las que no se ven; porque las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas.”

Me he dado cuenta que nuestras circunstancias son temporales, pero nuestra fe y confianza en Dios es eterna. He visto como el ingreso de mi familia ha crecido y disminuido en los últimos años igual que darme cuenta que no puedo confiar en ninguno de esos ingresos, Dios es lo único en lo que puedo confiar, pues permanece siempre constante.

También me he dado cuenta que no he dejado que mi fe crezca durante periodos de problemas económicos previos como claramente lo indica mi preocupación cada vez que el ingreso baja nuevamente. Esta vez, he decidido enfocarme en cómo nuestra situación actual me ayuda a acercarme más a Dios, puesto que es eso lo que realmente importa. Después de todo Dios sabe que esto iba a pasar y Él sabe cuando va a terminar y aunque yo no sé cuando esto vaya a pasar, quiero ser mas fuerte en mi fe y estar más cerca de Dios como resultado de mi situación.          

Una vez que cambiamos nuestro enfoque a lo que realmente importa, entonces las circunstancias temporales dejan de parecer tan malas puesto que solo se trata de dinero.   

Tener Una Actitud Alegre

Si dejamos que nuestras circunstancias nos pongan en un estado de ánimo podrido, dejamos de ser agradables. Cuando recientemente me percaté de que tendríamos un corte en el ingreso familiar, me convertí en una persona muy amargada, solo quería comer helado y seguir triste y deprimida. Me di cuenta que mi estado de ánimo afecto el estado de ánimo de mi esposo. Estaba tan triste que ni siquiera quería leer mi Biblia por que de alguna manera no quería recuperarme, solo quería revolcarme en mis penas. (¿Alguna vez te ha pasado?).           

La mañana siguiente después de la mala noticia, decidí leer mi Biblia por que el darse lastima a uno mismo es horrible. El capítulo que leí esa mañana fue Filipenses 4 y fue exactamente lo que necesitaba. El versículo 4 lee: “Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez lo diré: ¡Regocijaos!” Sentí que Dios mismo bajaba del cielo y en persona me escribía estas palabras solamente para mi. Este versiculo le dio animo a mi alma y me ayudó a aplicar los siguientes puntos.  

¡Se Agradecido!

Sin importar las cosas que tengamos siempre va aser mas facil quejarse por las cosas que no tenemos. Si tan solo nos dejáramos de enfocar en las cosas que no tenemos podríamos ver con más claridad lo que sí tenemos, cosas como: familia, amigos, la iglesia, e inclusive cosas materiales con las que Dios nos ha bendecido en el pasado. El apóstol Pablo nos recuerda en Filipenses que orar con agradecimiento es la clave para eliminar nuestras preocupaciones y ansiedad. “Por nada estéis afanosos; antes bien, en todo, mediante oración y súplica con acción de gracias, sean dadas a conocer vuestras peticiones delante de Dios. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestras mentes en Cristo Jesús.” Filipenses 4:6-7.   

¡No Pares De Dar!

Cuando no somo agradecidos por lo que tenemos dejamos de dar a nuestras iglesias y otras organizaciones de caridad cuando el dinero es escaso. La realidad es que la generosidad es lo que abre la puerta de la bendición de Dios. Una vez escuche a un pastor decir que si Dios recibe de tus ingresos el te lo dará ti. Como cristianos somo bendecido al ser de bendición, pero si guardamos todo el dinero para nosotro por miedo a su rendimiento entonces no podemos ser de bendición para otros en necesidad.

Nuestra iglesia ha estado enseñando sobre la generosidad y cuan dificil es sentir que no tenemos los recursos y materiales necesarios. Nuestro pastor nos enseñó un sitio de internet donde puedes ingresar la cifra de tu ingreso y te enseña la riqueza monetaria que tienes en contraste con el resto del mundo: www.globalrichlist.com. El salario mínimo en nuestra área está clasificada dentro del 11% de las personas mas ricas del mundo. Cuando nos demos cuenta de que tan rico somos en verdad en comparación con el resto del mundo ¿cómo podemos pues resistir dar un poco de lo que tenemos?

Haz Lo Que Puedas Y Deja Que Dios Haga El Resto

Tener fe que Dios va a proveer nuestras necesidades es de suma importancia, pero Dios nunca prometió que proveería para todos nuestros caprichos en cuanto queramos. Solo por que Dios proveerá en tiempos de escasez no significa que debamos de gastarnos todo el dinero de la misma manera que hacemos en tiempos de abundancia.     

Hay cosas prácticas que podemos hacer en lugar de tan solo creer incrementar nuestros recursos. Cuando el dinero está restringido en nuestra familia evitamos comer seguido en restaurantes o comprar más ropa y productos electrónicos de los que necesitamos. Tenemos que ser creativos y encontrar maneras de divertirnos sin tener que gastar mucho dinero. Si la cosas se ponen aún más apretadas entonces podemos hacer cortes en pagos de cosas como subscripciones de revistas, televisión por cable asi como otras cosas que no son fundamentals. Este tipo de cambios y recortes hará que te rinda mucho mejor el dinero que si tienes y hasta te dará más tiempo para pasar con tu familia sin distracciones.         

Dios está lleno de sabiduría y la quiere compartir con nosotros (Santiago 1:5) pero tenemos que estar seguros de escuchar a Dios y dirigirnos hacia donde Él nos llama para mejorar nuestra situación. Dios puede proveer un trabajo nuevo para ti pero lo mas seguro es que no te lo va a dar en las manos mientras tu ves televisión. Necesitamos poner el tiempo y esfuerzo en buscar y hacer lo que podamos, por otro lado Dios nos dará el favor y abrirá las puertas, pero tenemos que dar los primeros pasos.      

No Haga Escusas

Dios no haces escusas asi que nosotros tampoco deberíamos. Cuando Dios dice que proveerá para nosotros aveces respondemos con “Si, pero…” Dios siempre va a ser mas fuerte que nuestras escusas (nada vence al “si, pero la cruz”).    

Hablaba con una amiga quien acababa de descubrir que sería despedida en un futuro cercano. Le recordé que Dios había  estado con ella en otras ocasiones y nunca le había fallado y esta vez no iba a ser la excepción. Ella me respondió diciendo: “Sí, pero esto es demasiado grande”. Con sarcasmo le respondí “Ah sí, tienes razón. Esto es demasiado para Dios. Él hizo los cielos y la tierra, pero no podrá con tu problema”. En realidad ella sabe en su interior que Dios es más que grande para resolver su situación, pero dejó que su temor se verbalizara.

Muchos cristianos verdaderamente creen que su situación es mucho para Dios, o que Él no los quiere ayudar. En Mateo 8:2-3 un hombre leproso le pidio a Jesus senarlo si esa era su voluntad. El leproso sabía que Jesús era capaz, pero no estaba seguro si Jesús quisiera hacerlo. Jesús afirmó al hombre que si quería sanarlo y al instante lo sanó. Si Jesús no estuviera dispuesto a ayudarnos con todas nuestras necesidades, Él no hubiera muerto en la cruz por nosotros.   

Yo no comparto el principio de brindar consejo para los problemas de la vida que yo no seguiría. He tenido que aplicar todos estos principios en mi vida recientemente debido a un despido de trabajo que dejó de brindar una buena parte de nuestro ingreso. Yo sé lo que es sentirse y preocuparse por este tipo de situaciones, pero también he aprendido que lo que Dios dice en su palabra es verdad, y su verdad es más importante de lo que yo sienta o de lo que sean las circunstancias.

El apóstol Pablo aprendió a estar contento en tiempos de plenitud y recursos asi mismo como en tiempos de escasez el aprendió a preceder en la fuerza de Dios (Filipenses 4:11-13). Habrán tiempos de plenitud y exceso y tiempos de necesidad y escasez y ya que no podremos llevarnos nuestras posesiones y dinero con nosotros al cielo la única cosa que tenemos para cargar y sobrellevar con nosotros en esta vida y en la siguiente es  nuestra fe y nuestra relación con Dios. Además recuerda que Dios ha prometido no solo que proveerá todas nuestras necesidades pero que lo haría en plenitud. (Filipenses 4:19).           

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Cortni Marrazzo reside en Spokane, Washington junto a su esposo y sus dos hijos. Cortni tiene un Diplomado en Discipulado Bíblico y tiene una gran pasión por el ministerio animando el cuerpo de Cristo que es la iglesia. Ella y su esposo sirven como lideres de celulas en su iglesia local. Puedes contactarla en [email protected] o en Facebook.

  

 

Esta es la traducción de un artículo escrito por Cortni Marrazzo originalmente publicado en Crosswalk.com. Traducido y publicado con permiso del autor. 

Encuentre el artículo original en Inglés aquí: How to Trust God When Money Seems Scarce


*Traducido al Español por Ernesto Santiago